Para el entrenador liberteño, Javier Torrente, la diferencia entre su equipo y el de Cerro Porteño estuvo en el mejor manejo y el mejor tránsito del balón entre la defensa y el mediosector de la cancha.
“Si bien es cierto que convertimos los dos primeros goles de pelota parada, también es real que siempre fuimos mejores con el balón y creo que un rival difícil como Cerro, no tenga ninguna situación de conquistas y que mi equipo marque tres goles y tenga otras cuatro llegadas muy claras, nos deja tranquilos, porque evidentemente realizamos mejor las cosas”.
Torrente siguió justificando el triunfo Gumarelo: “Además tuvimos algo de fortuna, ya que si el cabezazo de Brítez entraba, tal vez la victoria se complicaba.
Al estratega argentino le caló hondo el lleno que presentó ayer la “Olla”, “sinceramente esto fue muy emocionante. Cuando yo dirigí a Cerro, no me tocó tener tanta cantidad de aficionados que alentaban al equipo”.
Finalmente dejó una reflexión: “Mientras tengamos posibilidades matemáticas, vamos a seguir peleando”.
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