CERRO PORTEÑO 0 - LIBERTAD 3

El Guma dio la nota del semestre al vencer en la Olla al todavía puntero del Apertura. El Ciclón preparó todo el cotillón y su gente no le defraudó. Sin embargo, los brazos arriba exhibió el equipo de Javier Torrente. Un cabezazo luego de un córner, una empalmada tras un tiro libre, y una contra genial, marcaron la diferencia. A falta de una fecha se coloca a 2 puntitos. El fin de semana próximo, Libertad-Tacuary, 12 de Octubre-Cerro.

El Cerro-Libertad fue un acontecimiento esperado. Generó mucha expectativa y seguramente ecos a partir de este domingo terrible. El partido en sí mostró dos caras distintas. Con la característica de siempre, incluso sabiendo que el empate servía, el equipo de Peter Troglio entró a ganar. El Gumarelo fue más calculador, pero que no se entienda esto como defensivo.

Ímpetu, ganas enormes y un poco de fútbol fue el Ciclón del primer tiempo. No estuvo nervioso, aunque siguió evidenciando su mal de 2009 (del Apertura más que nada). El Tigre Ramírez, hay veces, con el liderazgo que tiene y el ejemplo que da hacia el amor propio a la casaca, no basta. Y esto también, justo en el partido de la verdad, quedó expuesto.

Lo más interesante de la parte inicial del primer periodo fue una tiro libre en línea frontal (Sarabia hizo una infracción), que el reaparecido Miguel Torrén se encargó de estrellar en el travesaño de Bava.

Cerro y Libertad no hicieron las cosas bien como para que uno de los dos _o ambos_ pudieran haber estado más cerca del gol ya sea por conducto de situaciones elaboradas _claras, por supuesto_ o por reiteración de ellas. Lo del zaguero centro fue algo aislado, para no decir lo único que generó el azulgrana.

De un córner sobre el costado izquierdo del ataque visitante se encargó Michel Samudio. Al primer palo, como estaba previsto, corrió Adalberto Román, el igualmente defensor que ganó en tiempo, intuición, intención y salto a Mono Britez. Golazo a los 39 minutos y a otra cosa.

La etapa segunda mostró a un Libertad con una tranquilidad pasmosa y una inteligencia para manejar la historia, hechos característicos y bien marcados en el inicio de este operativo, allá por los primeros meses del presente año cuando el Guma era, y se perfilaba, como el mejor equipo de los ocho equipos de la Santander Libertadores y Javi Torrente el Marcelo Bielsa de la entidad blanquinegra.

Cerro tuvo paciencia y como siempre contó con la dación de sus futbolistas para ir a buscar, mal o bien, acostumbrada o extrañamente, ese gol que al final de cuentas le daba el cetro de forma anticipada. Pero la anotación se registró del lado opuesto.

Víctor Ayala demostró que es el dueño de los balones estratégicos. Perfilado sobre el costado derecho de su ataque efectuó el tiro libre que, en el corazón del área chica, Juan Samudio empalmó con el botín derecho tras girar típicamente. Golazo a los 10.
Cerro movió para ver si le daba otra cosa a su frente de ataque y en el complemento la opción más relevante que tuvo fue a través de uno de los refrescos, Cachi Ferreira, quien se animó a probar desde lejos.

Así, con Libertad sin molestarle priorizar el trabajo defensivo como carta de presentación con el 2-0 puesto y con más de media hora de juego por delante, pareció que así se iba el partido.
Empero, en tiempo de descuento Samudio hizo gatear a Fernández _ que en los goles precedentes, como es su estilo jamás salió_ y cedió a Marín para sellar el tercero de este partido que definió algo importante: El festejo se dará el siguiente domingo y por ahora, sobre todo con lo que ocurrió en barrio Obrero, no se puede precisar qué bandera flameará.

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