

Era un partido clave. Libertad venía dolido, ya que se sintió muy perjudicado por el arbitraje en la Copa Libertadores de América, pero al mismo tiempo, necesitaba de un triunfo para acercarse al puntero del torneo local y recuperar esa confianza anímica que sólo se logra ganando. Enfrente tenía a un rival durísimo como Nacional, con quien compartía el segundo puesto en la tabla.
Y una vez más, el equipo gumarelo demostró que ante los momentos de adversidad, se hace más fuerte y sale adelante. Tanto así que sólo bastaron 2 minutos de juego para que, luego de una clara falta dentro del área rival, el juez Amarilla pitara penal a favor de Libertad y el goleador Juan Samudio, se encargara de abrir el marcador, tras descolocar al arquero Don y ejecutar con sutileza.

En el complementario, fue el equipo albinegro el que manejó los tiempos del partido, ante la desesperación del rival por descontar. Hasta que, pasados los primeros 15 minutos del complementario, llegó un gran gol “made in cantera” del club Libertad. El juvenil Néstor Camacho acababa de ingresar y fue él mismo quien desbordó por izquierda, eludió a un defensor académico y habilitó perfectamente a Miguel Samudio, quien, con la velocidad que lo caracteriza, llegó hasta el área rival y dejó el balón en el fondo de las redes de Don.
Un minuto después, Beltrán, de cabeza, descontó el marcador y sentenció el 3-1 final. El único saldo negativo fue la expulsión del uruguayo Omar Pouso, quien viene demostrando una gran solidez en el mediocampo gumarelo.
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